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La igualdad salarial es el desafío pendiente que el Estado Paraguayo aún le debe al sector del Trabajo Doméstico Remunerado, pese a los avances en los últimos años en cuanto derechos en torno a la protección social. Los investigadores del Centro de Documentación y Estudios (CDE) recalcaron la necesidad de la igualdad de derechos para este sector en sus exposiciones en un evento que tuvo lugar este jueves en el Hotel del Paraguay de Asunción.

Patricio Dobrée sobre los principales hallazgos del estudio regional sobre trabajadoras domésticas migrantes y  Clyde Soto sobre  los “avances en la garantía de las trabajadoras domésticas en los últimos años en Paraguay” en un encuentro con representantes de Estado, investigadores y organismos internacionales como cierre del  “Programa de Acción Global: Trabajadores y Trabajadoras Domésticas Migrantes y sus Familias” llevado adelante desde el 2013  por Organización Internacional del Trabajo (OIT), en alianza con ONU Mujeres y con la cooperación de la Unión Europea.

Myrian Agüero y  Librada Maciel dirigentes de trabajadoras domésticas participantes del proceso impulsado por el Programa de Acción Mundial: Trabajadoras Domésticas Migrantes y sus Familias.

“La migración de mujeres que buscan oportunidades laborales en el sector del trabajo doméstico remunerado es un fenómeno consolidado en toda la región. De acuerdo con datos de la Organización Internacional del Trabajo (2015), se estima que en América Latina y el Caribe viven aproximadamente 3.500.000 mujeres migrantes, de las cuales el 35,3% son trabajadoras domésticas”, según el “Panorama regional sobre trabajadoras domésticas migrantes en América Latina”.

En cuanto al estudio que refiere al “Perfil de Paraguay con relación al trabajo doméstico de personas migrantes en Argentina” los datos sostienen que Argentina ha sido el país de destino mayormente elegido para la migración. La población paraguaya que reside en ese país rondaría las 550.000 personas y más de la mitad (56%) de ellas son mujeres. El 60% de las trabajadoras domésticas paraguayas que trabajan en Argentina eran también trabajadoras domésticas en Paraguay y tomaron la decisión de migrar buscando mejores condiciones laborales.

El trabajo doméstico forma parte de las trayectorias laborales previas de muchas migrantes paraguayas: 6 de cada 10 mujeres activas que han migrado en los últimos cinco años a la Argentina son trabajadoras domésticas.

Las mujeres que migran a la Argentina se caracterizan por ser personas jóvenes (cerca del 70% tiene menos de 29 años y alrededor del 36% se encuentra todavía en la adolescencia);  provenir de zonas rurales (56,5%); tener como proyecto la búsqueda de empleo (8 de cada 10 migran por razones laborales); no haber cursado muchos años de estudio (el 55,8% no superó la educación inicial básica y obligatoria); y muchas veces contar con hijos o hijas a su cargo, pese a que la mayoría están solteras en el momento de migrar.

Fotos: Ale Gómez/ Gentileza

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Librada Maciel, trabajadora doméstica migrante. Miembro del Sindicato de Trabajadoras Domésticas de Itapúa (SINTRADI)

Patricio Dobreé, Clyde Soto del CDE. Myriam Agüero del Sindicato de Trabajadoras Domésticas del Paraguay.

Patricio Dobreé, Clyde Soto del CDE. Myriam Agüero del Sindicato de Trabajadoras Domésticas del Paraguay.

Clyde Soto y Myriam Agüero

Clyde Soto y Myriam Agüero

Lilian Soto, investigadora del Centro de Documentación y Estudios.

Lilian Soto, investigadora del Centro de Documentación y Estudios.

Cristina Romero, migrante paraguaya en Brasil. Patricio Dobreé, Lilian Soto y Sandra Bosch

Cristina Romero, migrante paraguaya en Brasil. Patricio Dobreé, Lilian Soto del CDE  y Sandra Bosch, de ONU Mujeres.

Librada Maciel, el Sindicato de Trabajadoras Domésticas de Itapúa (SINTRADI), Carolina Taborga de ONU Mujeres y Ernesto Abdala de OIT cierran el evento en el Hotel del Paraguay.

Librada Maciel, el Sindicato de Trabajadoras Domésticas de Itapúa (SINTRADI), Carolina Taborga de ONU Mujeres y Ernesto Abdala de OIT cierran el evento en el Hotel del Paraguay.