• 05 Feb 2010

Lilian Soto // A las mujeres haitianas que ya no están, amigas, hermanas, madres, compañeras, amantes.

Con la esperanza de que nuestro recuerdo y nuestros pensamientos las acompañen en su tránsito a esa naturaleza que respetaron, cuidaron y amaron, y en cuyo abrazo se han marchado…

Que sus savias se unan a la tierra para que lo nuevo vuelva a surgir…

A las mujeres haitianas que continúan allá, buscando y enterrando a sus muertos y muertas, a sus hijos e hijas, a sus compañeros y compañeras, a sus amores, a sus madres y padres, a sus hermanos y hermanas,

Que nuestra solidaridad las apoye, para que puedan recuperar la armonía y el equilibrio en sus vidas…

Que nuestras energías, unidas, lleguen hasta ellas para que las fortalezcan en la difícil tarea de hacer que su tierra, sus cuerpos y sus corazones, cierren sus heridas y renazcan…

Que nuestras palabras de coraje las ayuden a superar la angustia por el futuro de su país y se sientan acompañadas por sus compañeras feministas de
todo el mundo…

A las compañeras que están al frente de los campamentos de solidaridad, en República Dominicana, en la frontera y en las ciudades de Haití,
Que nuestra admiración y apoyo las apunten, para que no decaigan en su labor de soporte a las mujeres haitianas, y las ayuden así a dar continuidad a sus organizaciones, recuperar sus archivos y sus memorias, y mirar el horizonte para decidir sus caminos, sin que nadie más decida por ellas…

Y a todas ellas les decimos:

Que pueden contar con nuestro compromiso solidario de apoyo a sus reivindicaciones…

Que en Paraguay existen mentes, sentidos y voces que las están acompañando…

Y que estamos seguras de que Haití renacerá, de la mano de hermanas que pertenecen a esa constelación universal de mujeres que luchan, pelean, caen y vuelven a levantarse,

para seguir construyendo…

Que así sea…

 

Haití niña


*A decir de la autora: collage de pensamientos y deseos que muchas expresaron en diversos momentos, algunos textuales, por lo tanto se trata de una construcción colectiva. Leído en el homenaje realizado el jueves 4 de febrero al pueblo de Haití, y las compañeras feministas muertas en el terremoto. Acto organizado por la Secretaría de la Mujer de la Presidencia de la República en el Centro Cultural de España Juan de Salazar.